CAPITULO 37
-Perdón por tardar.
Los estúpidos no dejaban que entrara. Los amenace diciéndoles que la policía
venia- le dijo a Pedro, quien estaba levantándose del piso, completamente
adolorido.
-Pudiste ser más
rápida.- le dijo apenas audiblemente.
-Cecily, lárgate ahora
mismo.- le dijo Tom y ella lo miro.
-¿Qué has hecho Tom?- pregunto mirando el cuerpo de Zac.
-No lo hice yo…- dijo el, como si temiera decepcionarla.
-Eso no importa. Es tu culpa y lo sabes. Tom… ¿Que has hecho de tu vida?
¿Intentar arruinar la vida de ellos? Mira lo que estás haciendo por venganza…
eres un idiota.- le dijo Cecily.
Paula noto que ella había cambiado. Parecía alguien completamente diferente, no esa chica que tanto había deseado lastimarla…
Paula noto que ella había cambiado. Parecía alguien completamente diferente, no esa chica que tanto había deseado lastimarla…
-¡Ellos me quitaron todo! ¡TODO!.- grito Tom.
-Te equivocas. Thomas, nuestro padre se quitó la vida, lo sabes…
-Por culpa de ellos. Y te perdí a ti…- le dijo Tom y ella negó con la
cabeza.
Pedro se había sentado en el piso y respiraba pesadamente.
-Porque odio en lo que te convertiste… ¿Sabes algo? Pedro me llamo hoy,
él no sabía que yo vivía aquí, solo quería mi ayuda. Y acepte. Ya sabes que te
llame y rastreamos en donde estaban, los seguimos y luego nos trajiste hasta
aquí.
-No deberías estar aquí…- le dijo él.
-Pero aquí estoy. Porque ellos son mis amigos, y no permitiré que sigas
dañándolos…
-¿NO QUIERES VENGAR A NUESTRO PADRE?- le grito él y ella dejo caer una lágrima.
-¿Nuestro Padre Tom? Nuestro padre es un asesino. Y no me refiero a la
clase de asesino que creías… ¡EL MATO A NUESTRA MADRE!- le dijo ella y Tom sintió
todo el aire huir de sus pulmones…
-No puede ser… el no… ¡Él la amaba!- dijo Tom.
-Eso nos hizo creer. El me lo acepto cuando había secuestrado a Paula la
vez pasada. Me dijo que el mato a nuestra madre… y me disparo a mí, quiso
matarme también y no lo logro…
-Cecy… eso no puede ser cierto…- le dijo Tom sintiéndose un estúpido.
-Tú no eres malo Tom. Tienes odio y rencor en tu corazón, porque crees
que ellos tienen la culpa. Pero no es así. Él no era bueno…
-Intento matarte…- dijo Tom y luego corrió a ella y la abrazo.- Cecy,
hermanita, tu eres lo más importante para mi…
-Lo se Tommy, lo se… ¿Somos hermanos no? ¿Recuerdas nuestra promesa? Una
vez que nuestro papa estaba golpeando nuestra mama y nosotros éramos pequeños…
-Juntos por siempre y para siempre.- dijo el recordándolo.
-Por favor… tienes que olvidar todo… ¡Déjalos ser felices! Tom, vuelve
conmigo, vuelve y seamos tu y yo. Los mismos hermanos de siempre. Yo comencé
una nueva vida aquí, llena de felicidad, pero siempre me hacías falta… ven a
vivir conmigo.
-¿Serias capaz de perdonarme?- pregunto Tom y ella sonrió.
-Siempre te perdono. Y más si estas arrepentido. Pero necesitas
jurárselos a ellos…y pedirles perdón por todo. Tom, sabes que Pedro pudo
matarte desde hace mucho si hubieras querido…
-Él tenía miedo.- dijo Tom.
-No Tom…- dijo Pedro poniéndose de pie y acercándose a él.- no tenía
miedo. Pude encontrarte en cuestión de segundos y matarte. Pero no te busque,
al contrario, me escondí, ¿Y sabes
porque? Porque Cecily me pidió que nunca te hiciera daño…
-¿Enserio lo hiciste?- pregunto Tom a su hermana y ella asintió.
-Pedro lo prometió, que nunca te dañaría, por mí.- le dijo ella y
entonces Tom volvió su mirada a Pedro.
-No te pido que me perdones, porque no lo harás, pero… ten por seguro
que no voy a interferir más en sus vidas.- dijo Tom, con algo de trabajo.
-Yo te perdono Tom. No hay resentimientos… pero espero, que puedas
aprender de esto y no volver a hacer daño nunca.
Tom únicamente asintió. Tampoco se iba a poner sentimental con ellos.
-Paula... lo siento.- le dijo Tom y ella lo miro con odio.
-Lárgate.- le dijo ella.
-Suéltenla ya, les pagare después. Espérenme afuera.- les dijo Tom.
Soltaron a Paula y salieron.
-Yo los matare, ellos le hicieron esto… y tú tienes la culpa…- dijo Paula
a Tom, mientras miraba a Zac.
-Siento mucho eso. yo nunca quise que pasara, no les ordene que lo
hicieran… era un buen chico.- dijo Tom.
-¡Eso a ti no te importa! Yo te voy a denunciar! Para que te pudras en
la cárcel…
-No tienes que hacerlo. Me entregare. Sé que suena estúpido. Pero quiero
aprender mi lección. Y también declarare en contra de los tíos de Zac. Ellos
son unos asesinos a sangre fría.- dijo Tom.
-¡No puedes ir a la cárcel!.- dijo Cecily asustada.
-Calma hermana, nunca he matado a nadie. No será mucho. Quiero aprender
mi lección. No quiero ser como mi padre…- dijo Tom y ella lo abrazo
fuertemente.
-Cecily… enserio gracias por todo, es la segunda vez que nos ayudas,
nunca podre acabar de agradecerte.- le dijo Pedro.
-Para eso somos amigos Pedro. Nunca recompondré todo el daño que les
hice…- dijo Cecily.
-Esta pagado. Gracias enserio.- le dijo Pau y se sonrieron.
Entonces Paula miro el cuerpo de su amigo y sintió sus lágrimas caer, se
arrodillo a su lado y Tomo su helada mano.
-Tenemos que… llamar para que vengan por su cuerpo…- dijo Tom.- lo hare
yo.
-Tom… sabes que inmediatamente te llevaran…
-Lo se Cecy, calma.- le dijo él.
Paula no podía alejarse de Zac. Vio como Tom y Cecily salían.
-Paula... aquí apesta a gasolina, no quiero que nada pase, vámonos…
esperemos a que llegue por… Zac.- le dijo Pedro acercándose a ella y Tomándola
de la mano.
-Estas muy lastimado…- dijo ella y Pedro le sonrió.
-Calma, estoy bien.- le dijo él.
Pau se quedó llorando ahí, frente al cuerpo de su amigo y únicamente
decía “te amo Zac” y Pedro sentía golpe tras golpe al oír esas palabras… pero
solo quería apoyarla. Nunca soltó su mano, la abrazo y la consoló.
-Les pedimos que salgan, tenemos que llevar el cuerpo a que se haga la
autopsia y después prepararlo para el funeral.- dijo una persona.
Paula se levantó muy a su pesar, sintiendo el dolor de la perdida más grande
de su vida, su mejor amigo…
Pedro la abrazo mientras salían. Aun le dolía el cuerpo entero, y el
rostro y todo…
Vio a la policía, vio como llevaban a los tíos de Zac esposados y también a Tom y Cecily a su lado.
Vio a la policía, vio como llevaban a los tíos de Zac esposados y también a Tom y Cecily a su lado.
Los miro y les sonrió a ellos.
Pedro convenció a Paula de volver a casa y que entonces el se encargaría
del funeral de Zac, ella lo escucho y dejo que la guiara.
Fueron en el auto del chico, ella lloraba, no lo superaba…
Llegaron a casa de ambos y bajaron. Pedro abrió la casa y entro.
-Iré a ducharme…- dijo ella como un zombie.
-Creo que alguien querrá abrazarte antes que nada…- dijo Pedro, viendo
como sus amigos salían de la cocina, había estado ahí sentados, sin decir
prácticamente nada.
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Sigue →
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