CAPITULO 34
Pedro se quedó momentáneamente en shock, no podía creer lo que ella había hecho…
Pedro se quedó momentáneamente en shock, no podía creer lo que ella había hecho…
Entonces vinieron a la
mente los recuerdos del día anterior…
La forma en que ella había
abrazado a sus amigos y a su hermano. A su mama, a Ian, a George, a Kate, a la
nana y Chris… su repentino cambio de humor, su llanto inexplicable, la forma en
que le había recordado cada segundo que pasaron juntos, cada recuerdo,
su principio de la historia… la forma en que le pidió que hicieran el amor
salvajemente, para recordar aquella primera vez, lo que marco un inicio, había
marcado ahora un final…
Y luego estaba el beso, ese maldito beso que a él tan conocido se le hacía,
y ahora sabia porque, porque así la había besado ya una vez, cuando él sabía
que sería su último beso, cuando él la dejaría para no hacerle más daño…. Un
beso de despedida, con ese mismo sabor dulce y a la vez amargo…
No la volvería a ver. No había más que hacer…. Leía una y otra vez las
palabras de ella, ¿Y no sabía qué hacer, como iba a encontrarla? ¿Y cómo sabía
que no llegaría tarde? Y entonces el rompería el último deseo de ella…
No buscarla. Dejarla morir… Morir por él, por sus amigos, por su familia….
Una muerte honorable sin duda.
-¡Pedro! ¡Paula!- escucho el grito de Agustín, en ese momento no quería
escuchar a nadie…
Se puso de pie, se vistió rápidamente, tomo la nota y la guardo, y luego
miro la rosa…. Un enorme nudo se formó en su garganta…
Salió de la habitación y vio a los chicos, ya vestidos…
-Tus padres dijeron que no compraron los pasajes de avión, hubo unos
problemas, ¡Estaremos otros 2 días aquí!- comento Alice con una sonrisa
-Eso es… genial.- les dijo y su voz se cortó.
-Pedro… ¿Qué pasa?- pregunto jane soltando la mano de Hernán y
acercándose a él.
-Se… fue…- dijo Pedro únicamente y todos lo miraron extrañados.
-¿Se fue? ¿Quién?- pregunto Felipe sin entender.
-Ella… Paula…
-¿Qué?- pregunto Gonzalo inmediatamente.
-Por favor… prometan que no dirán nada a nadie… tienen que hacerlo, Gonzalo…
-¿Qué pasa Pedro?- pregunto Gonzalo asustado.
-Prométanlo.- les dijo y todos asintieron.- Tom quería una venganza… quería
dañarlos a ustedes, dañar a nuestros padres, dañarme a mi… y entonces ella…
hizo un trato con el… se entregó a él… para salvarnos a nosotros…
-¿Qué estás diciendo? ¿Cómo que se entregó? Quieres decir que…
-¡Se fue Gonzalo! ¡MALDITA SEA! ¡SE FUE! ¿Qué PARTE ES TAN DIFICIL DE
ENTENDER? ¡DARA SU VIDA POR NOSOTROS!-grito Pedro con todo el coraje que sentía
dentro de él, toda la impotencia.
-¿Y QUE MIERDA HACEMOS AQUÍ? ¡VAMOS POR ELLA!- grito Gonzalo También.
-Calma, calma Gonzalo, no te alteres…- le dijo Alice abrazándolo.
-Pedro… tú también, calma.- pidió Jane
-¡Es mi hermana! ¿Cómo voy a calmarme? No puedo… no pueden hacerle daño,
no a ella… ella es mi… es mi… hermanita. Le prometí que nunca nadie le haría
daño, ella es lo más importante para mi…- comenzó a decir Gonzalo mientras se
jalaba el cabello con desesperación.
-Lo entiendo amigo, pero gritándose entre ustedes no arreglan nada.- le
dijo Agustín calmándolo.
-Yo te entiendo Gonzalo. Lo siento, se lo que sientes… también es lo más
importante para mi…
-Es mi hermana…- le dijo Gonzalo
-Quizá no es mi hermana, pero si es la chica que amo… y quizá eso para
ti es algo tonto, quizá no se compara… pero que sentiría si fuera Alice…- le
dijo Pedro y Gonzalo abrazo a Alice de forma refleja. Nunca permitiría que nada
le pasara a ella.
-Entiendo… perdón amigo. Tú no tienes la culpa.- se disculpó Gonzalo.
-Si la tengo.
-¿Pero qué haremos? Llamemos a la policía… no podemos simplemente estar
aquí… sin hacer nada. Avisemos a nuestros padres…
-No podemos. Gonzalo, ella tuvo un enorme motivo para pedirme que no
hiciéramos nada, ella sabe más que nosotros, y si me pidió que no la buscáramos,
es porque sabe que a la primer señal,
-Tom se dará cuenta y dañara a alguno de todos… no creo que quieras
eso.- le dijo Pedro y Gonzalo se sentía impotente.
-¿Entonces la dejaremos morir?- pregunto Gonzalo con un enorme nudo en
la garganta.
-Claro que no. Yo hare algo, pero no lo hare directamente. Ustedes
tienen algo más importante que hacer. Van a fingir que no saben nada. Es muy
importante… hay alguien cercano a ella y a mí, que nos vigila, así que tiene
que parecer que son felices y no tienen idea… y yo me encargare de encontrarla…
-Antes de que sea tarde.- completo Gonzalo y Pedro asintió, muy a su
pesar.
-Lo haremos, cuenta con nosotros, nadie sospechara. Pero Pedro, ten
mucho cuidado, y descuida, nadie sabrá nada de esto. Haz lo que tengas que
hacer…
-Y otra cosa… digan a nuestros padres que decidimos un día de parejita romántica.-
les pidió Pedro y ellos asintieron.- me duchare y me iré. Antes de que puedan
salir del país y se vuelva algo imposible.
-De acuerdo.- respondieron todos.
Pedro volvió a su habitación y cuando entro, vio que Gonzalo lo había
seguido.
-Confió en ti Pedro, una vez la rescataste… sé que puedes hacerlo… y
otra cosa… enserio eres, el mejor amigo que alguien puede tener. Te quiero Bro,
eres lo mejor para mi hermana.- le dijo Gonzalo y ambos chicos se abrazaron
Era lo que necesitaban, saber que no estaban solos, y que había alguien más,
que amaba a la misma chica tanto como uno mismo aunque fuera de una forma
diferente.
-Tú eres también el mejor amigo. Te prometo. Te juro que la voy a
encontrar.- le dijo Pedro con una sonrisa y Gonzalo asintió y salió de la habitación.
Había muchas cosas que Pedro tendría que enfrentar, pero no estaría solo, sabía quién lo ayudaría, y necesitaba hacer una llamada en ese mismo instante…
Había muchas cosas que Pedro tendría que enfrentar, pero no estaría solo, sabía quién lo ayudaría, y necesitaba hacer una llamada en ese mismo instante…
Tomo su celular antes de entrar a la ducha. Sonó unas cuantas veces y
entonces la persona en la que pondría toda su confianza, respondió.
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Sigue →
Capitulo del día 08-05-15
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